..................................Cambiando Paradigmas .... Psicóloga. Verónica D. Montes ................

Los Niños del tercer Milenio... los niños de Hoy... pequeños grandes Sabios!!

Los Niños del tercer Milenio:
Este proceso se inició al momento del cambio de era, de Piscis a Acuario, exactamente en 1948 según la astrología , es decir después de la segunda guerra mundial, cuando ya se pudo apreciar rápidos cambios generacionales (los hippies, los Beattles, Woodstock, el rechazo a la guerra de Vietnam, etc.), los cuales se aceleraron en las décadas de los ochenta u noventa con el New Age. Se apreció una “masificación” espectacular de cambios significativos en los niños y niñas que nacían a partir de los noventa y principio del 2000... presenciamos en este lapso de tiempo, cinco generaciones de niños y niñas (u oleajes), precedidas por una generación llamada la “Generación de Transición”...
GT : La Generación de Transición está compuesta por los adultos y abuelos actuales, así como los niños, niñas y jóvenes cuyo sistema nervioso central (SNC) está en proceso de ajuste; lo que se traduce patológicamente en niños y niñas con Déficit de Atención e Hiperactividad, así como en niños teflón , autistas y bipolares . Dichos cambios se hicieron sentir a partir, más o menos, la década de 1950.
El termino “generación” es una manera de decir. No es que cada generación está compuesta con los hijos o hijas de la precedente. La aceleración de esos cambios es tal que hablamos de periodos de 5 a 10 años para las dos primeras generaciones. Las tres últimas generaciones están llegando casi paralelamente, con intervalos de sólo un par de años. Eso quiere decir que en una misma familia, por ejemplo, el hijo mayor puede ser de la primera generación, y los hermanos menores la segunda, tercera, cuarta o quinta generación.
G1 : Es la primera generación de niños y niñas del Tercer Milenio, los cuales empezaron a nacer masivamente a finales de los años ochenta y al principio de los años noventa. Esta generación tiene tendencia a ser extrovertida, retadora y carismática. Rompen paradigmas. Esta generación presenta varias tipologías de niños y de niñas, una de ella fue el famoso “Índigo” que se ha hecho notar por su rebeldía, aversión a la mentira y por no tener miedo a denunciar lo que estaba mal y carente de amor. Esta generación puso en tela de juicio la educación tradicional. Si bien es cierto que esta generación tenía tendencia a tener un metabolismo de un alto nivel energético, estos niños y niñas ya no presentan síntomas patológicos de Hiperactividad ni de Déficit de Atención (salvo cuando hay casos de entorno violento o demasiado caótico, con gran carencia afectiva) que solía diagnosticarse en la Generación de Transición.

G2 : Es la segunda generación de niños y niñas del Tercer Milenio. Se hacen notar entre 1992 y 2000, aunque algunos de estos niños nacieron antes. Tienen tendencia a ser más tranquilos, pero poseen una gran fuerza interior. Lideran a través del ejemplo, son pacíficos y gentiles. En general, pueden ser bastante introvertidos. Son muy sensibles ¡a veces demasiado sensibles! Esta generación se divide en varias tipologías de niños y niñas, una de ella es el niño “Cristal” .

G3 : Es la tercera generación de niños y niñas del Tercer Milenio. Son “balanceados” y determinantes. Cuentan con una lógica multi-nivel aun mayor que las dos primeras generaciones y tienen acceso a una conciencia aún más “ampliada”. Han nacido entre 1998 y 2005, más o menos, aunque existen algunos jóvenes y adultos de esta generación que han llegado antes.

G4 y G5 : Son niños y niñas que tienen un alto nivel de “maestría espiritual ” , es decir, que manejan innatamente la multi-lateralidad y multi-dimensionalidad y tienen un alto grado de desarrollo espiritual. Tienen además la facultad de sentir a gran distancia. Están naciendo a partir de 2003, aproximadament e, aunque hay casos aislados de jóvenes que nacieron antes. Cada uno de estos niños y niñas viene con un don específico que los educadores deberían reconocer y ayudar a desarrollar. Cada uno de ellos va a ayudar enormemente a la construcción de la nueva sociedad y abrir la conciencia y la vida interior de los adultos. La Fundación Ascend de Australia ha documentado en detalle no solamente cinco generaciones sino siete, cada una dividida en once sub-clases de perfiles psico-emocional-espiritual
es específicos; lo que nos da un total de 77 sub-clases de niños y niñas del Tercer Milenio repartidos en siete oleadas. No es de sorprender sabiendo de la riqueza y variedad del Ser intimo humano y la generosidad de la Naturaleza.

Se la denominaba a nivel internacional Índigo porque, según la autora estadounidense Nancy Ann Tape, su campo energético, también llamado aura, vibra dentro de un espectro azul-añil, lo que corresponde a una frecuencia de expansión de conciencia y cuyas características principales son la sensibilidad, intuición y espiritualidad.

Los niños Cristal son niños muy sensibles que llegaron paralelamente o después de la generación una. Son muy perceptivos y hasta psíquicos, en varios grados. Tienen un importante propósito de vida global, su corazón es muy abierto. Son niños un poco introvertidos que poseen una fuerza interior extraordinaria. Son descritos en los libros de Doreen Virtue, Eduardo Melamud , Sandra Aisenberg, y en los artículos de Sharyl Jackson, Steve Rother , Celia Fenn , entro otros autores.



Los Niños de Hoy, ¿Quienes son?
Llegan a la tierra, traen mensajes de conciencia y expansión.
Traen consigo una gran madurez espiritual. Saben a donde van, y hasta algunos tienen destellos del lugar de donde provienen.
Traen enseñanzas, proponen cambios. Tienen una gran misión: recordarnos quienes somos; vienen a despertarnos de los sueños materiales en los cuales nos hemos dormido.
Su impulso espiritual los empuja a hacer, a decir y a actuar.
Son los Niños de Hoy, los Nuevos Niños. Grandes seres espirituales jugando a ser niños.
El amor los impulsa, buscan cambiar la tierra, cambiar al hombre, transformar la realidad.
Quien quiera reconocer a estos niños, simplemente mírelos a los ojos, su transparencia y pureza desnuda el alma de quien los mira. Miran fijo, de forma sabia y madura.
Cuando se está frente a un nuevo niño, la emoción desborda el corazón, dentro se despierta una sensación de reverencia y respeto por él.
Igualmente no siempre sucede esto, muchos adultos están tan inmersos en sus mundos de problemas y preocupaciones, que estos niños pasan desapercibidos. Pero aun así ellos actúan, actúan aun más con esas personas. Si sus miradas no encuentran eco, entonces golpearán sus puertas, y si nadie corre a abrirles, permanecerán presentes hasta que alguien los invite a pasar.
Pero la espera a veces se hace larga, se hace eterna, y comienzan a olvidar lo que han venido a decir.
La alegría y amor de estos niños puede llegar a cambiar el mundo, pero necesitan de nosotros… Ahora es tiempo de abrir los ojos.
Vea al niño que está a su lado, y pregúntese qué vendrá a decirle.

El niño y su alma Maestra:  En la casa, en la escuela, en el día a día de la vida, grandes almas afloran, espían por detrás de cada niño, nos preguntan, nos hacen reflexionar, nos desafían al cambio y luego se esconden y juegan a que no están.
¿Es conciente de esto el niño? No, la mayoría de las veces él tan sólo expresa lo que siente, deja fluir a través de él a su alma Maestra.
No solo los niños tienen esta alma Maestra, todos la tenemos, pero cuanto más hemos vivido, cuanto más miedos tenemos, cuanto más represiones cargamos, más lejos estamos de ella. Imaginen una enorme luz que está dentro de cada uno, pero que se encuentra tapada por capas y capas; esta luz nos habla, pero casi no la oímos. A veces logramos conectarnos con ella, y llamamos a lo que sentimos: “intuición”.
Somos nosotros en planos superiores de sabiduría, es nuestra alma maestra. El Alma tiene una esencia pura, y se caracteriza por la alegría.
Todos los seres que están más en contacto con su alma son alegres, y esta alegría es eterna. No depende de acontecimientos externos o cosas materiales. Es la alegría del Ser, del Espíritu, es una alegría inmutable.
Muchas personas viven preocupadas por su futuro, por las deudas, conflictos familiares, etc. Problemas y más problemas tapan esta luz, tapan esta alegría.
El alma del niño está íntimamente ligada a su cuerpo; por ello los niños se expresan tan espontáneamente, son puros, inocentes, y viven en constante alegría. Ellos expresan a través de su cuerpo el estado de su alma. Ellos viven en otra frecuencia, en una frecuencia sin maldad, propia del alma. Cuanto más se proteja la unión cuerpo-alma del niño, más conoceremos su esencia. Y cuanto más conectado esté el niño a ella, más lo demostrará. Se verá feliz vibrando en armonía con el entorno.

¿Qué es lo que deben darle los padres?, ¿Qué es lo que pide el niño?
Presencia. Presencia no es solo física, todo lo contrario, a veces un padre puede ser muy “presente”, pero en realizad no está. Por ejemplo: un padre que sobre exige al niño porque quiere “lo mejor” para él, lo persigue, lo ahoga con sus preguntas y “su interés” de que todo esté en orden, y no se detiene a escuchar sus necesidades. Este padre en realidad no está con su hijo, no lo conoce, no sabe lo que necesita. Simplemente no se lo pregunta. Este padre no está presente. Otro ejemplo menos evidente de un padre “presente” que no está, es aquel padre que cuando el niño le habla, le cuenta, le pregunta, él solo quiere silencio, estar tranquilo, descansar, no tiene tiempo para cuestiones infantiles. Aquí el padre tampoco está. Presencia, es estar en cuerpo y alma con el niño, es interesarse verdaderamente.
• En relación a lo anterior, lo que un padre debe darle entonces, es su escucha. Cuando el niño habla, cuenta su día, sus aventuras, o le pregunta sus inquietudes (sean para el adulto insignificantes o no); este debe escucharlo con todo su ser, con toda su esencia, con su cuerpo. Póngase en el lugar del niño, interésese realmente por sus preocupaciones. Es importante que sea un interés sincero, que surja de su corazón, de nada sirve que sea de otra manera. Esto es escuchar presente. Esto es amar al niño, amar a ese Ser pequeño y grande que necesita su guía. Guíelo presente, no pierda la oportunidad que el universo le dio.
Seguridad. Es importante transmitirle seguridad. Mantenga sus miedos puertas adentro, consérvelos para trabajarlos con usted. Darle seguridad es igual a darle Confianza. Demuéstrele que confía en él. ¿Cómo puede demostrárselo? En pequeñas acciones, por ejemplo déle algunas actividades a su cargo. Déle tareas para que realice, pero tareas que él le haya pedido realizar, y usted anteriormente no se lo permitió a causa de sus temores. Por supuesto que no me refiero a que si le pidió encender la hornalla, usted se lo permita. Usted sabe a cuáles actividades me refiero. Voy a dar un ejemplo para que quede más claro: A los niños les encanta cocinar. Si el niño quiere ayudarlo, déle una tarea simple, y si es necesario, explíquele cómo realizarla, y luego déjelo. No lo espíe, no se entrometa en lo que hace, no lo “ayude”. Si lo hace bien o mal no importa. CONFÍE EN ÉL. Si no confía, él lo notará y perderá su confianza e interés en el hacer. Perderá su confianza en ÉL.
Usted dirá que esto es exagerado, que un niño no va a perder la confianza en él mismo ante algo tan insignificante. Piense en esto: El universo del niño es sensible a cada acto nuestro, a cada emoción que le trasmitimos con nuestra mirada y con nuestras palabras. Su Ser percibe todo. Si no confiamos en él, lo percibirá. Aprecie todo lo que el niño hace. No se enfoque en lo que hizo mal, sino en que intentó hacerlo.
• Aprecie sus logros. Si el niño realizó bien alguna tarea, o lo sorprendió en algo: felicítelo, aliéntelo, admírelo. Esto también genera confianza en si mismo.
• El padre debe darle herramientas para Expresarse.
• Debe saber cuando “ceder” y cuando poner un sano límite.
El padre debe dejar que el niño sea niño.

¿Qué es la energía índigo? ¿Y qué es la energía Cristal?
Prefiero enfocar el tema desde el punto de vista de la energía más que el de los niños, porque de esta manera lo despersonifico, y podré hablar no sólo de los niños, sino también de adultos.
En la tierra hay almas de todos los niveles evolutivos, razón por la cual existen diferencias abismales en intereses, gustos, afinidades entre una persona y otra.
Cuando digo “Índigo y Cristal”, hablo de las energías que traen los seres nuevos, y cuando digo “nuevos”, no me refiero a la edad, sino a las almas nuevas que están hoy en la tierra.
Por lo tanto estos términos no solo nos hablan de los niños, sino de todas aquellas personas, sin importar la edad, que han venido con un propósito bien definido, y la energía que traen los ayudará a llevarlo a cabo.
Son seres con una energía diferente, ni mejor ni peor, solo diferente, porque todos los seres son igual de importantes y necesarios en el mundo, si cada uno cumple con su parte y no se olvida a qué ha venido.
Estos seres nuevos, están en este mundo pero muchas veces se sienten ajenos a él, sienten una gran melancolía porque saben que hay algo más y no saben como alcanzarlo. Son seres que se angustian al ver el mundo como está, y buscan las posibilidades de cambiarlo.
La energía Índigo
Muchos seres que hoy están en la tierra tienen esta energía.
Es una energía rebelde, cuestionadora de las masas, rompedora de estructuras familiares, culturales, religiosas.
Son seres que no se adaptan a modelos preestablecidos, sufren cuando se los quiere encasillar en alguno, y la forma que encuentran para defenderse de ellos, es a través de la rebeldía.
Estos seres quieren diferenciarse, luchan por no ser iguales a todos.
Están despiertos, muchos concientemente, es decir saben lo que quieren, a donde van y qué quieren lograr. Aceptan las elecciones de los demás aunque no estén de acuerdo con ellas, pero están firmes en su propósito. Otros, están despiertos también, pero no son concientes de la energía que traen, y muchas veces la desperdician queriendo cambiar a los demás o a los lugares en donde se encuentran. Desperdician su energía y potencial, intentando cambiar la vida de los otros forzadamente.
¿Como reconocer a un adulto con energía índigo?
Es muy simple, no estará quieto ante una injusticia. En su trabajo, por ejemplo, no se dejará sobrepasar por sus “superiores”, defenderá su postura si la cree justa para él y para los otros. No se dejará engañar, no mentirá, y si lo hizo por alguna inconciencia del momento, no se lo perdonará fácilmente y buscará remediar el error.
Son seres leales. Idealistas y defensores del bien común.
La energía Índigo es muy necesaria en el mundo en que estamos viviendo, pero a veces, estos seres se identifican tanto con el “soy rebelde y peleador”, que no logran encontrar otros caminos para solucionar los problemas que se les presentan.
Tiene que lograr encontrar el equilibrio, y actuar con la energía justa para cada situación, no siempre con la misma. Y a la vez, deben aprender a usar otras herramientas, otros dones que traen a desarrollar. Si solo actúan por el impulso de identificarse con el “soy rebelde y peleador”, no dejará de ser un personaje más de tantos otros que los humanos se arman, por temor a mostrarse tal cual son.
La energía índigo, como dije anteriormente, es necesaria muchas veces, pero no siempre.
El mundo está pidiendo otra cosa, pide equilibrio, pide la rebeldía solo cuando es necesaria, y la humildad para poder encontrarse con el otro, corazón a corazón, alma a alma, sin personajes de por medio.
Se necesita paz, no guerra. Se necesita amor, no conflictos
Entonces esta energía puede ser justiciera, pero amorosa.
Un ser índigo puede tener un guerrero dentro, pero un guerrero espiritual, no un guerrero del ego.
Si usted se siente identificado con estás características, obsérvese en su día a día. Vea cuando actúa impulsivamente sin detenerse sentir la sabiduría de su alma. Sea una persona auténtica. Defienda lo que siente pero sin desestabilizarse, sin perder su centro de equilibrio. No entregue toda su energía, solo lo justo que requiera la situación
Los niños Índigo o la energía Índigo de los niños
Un niño con esta energía, exigirá a sus educadores, maestros o padres, no ser visto como uno más del montón; exigirá formas dinámicas de aprender. Querrá todas las respuestas, y no solo esto, querrá escuchar la verdad siempre. Estos niños son muy exigentes consigo mismos y con el entorno. Cuentan con un exceso de energía que hace que a menudo no encuentren los mejores medios para exigir lo que merecen. Cuando se encuentran inconformes con lo que les ofrecen, fácilmente se desvían hacia la rebeldía o agresividad. No aceptan órdenes impuestas, y cuando se encuentran ante personas autoritarias, se muestran desinteresados y cuestionadores. No aceptarán un “No porque no”.
Quien quiera llegar verdaderamente al alma de estos niños, deberá “ganarse” ese privilegio. No es simple conquistar su amor, ni calmarlo fácilmente. Deberán escucharlo, verlo, comprenderlo sinceramente, y ahí lo conocerán. Él se entregará al adulto, cuando el adulto se entregue a él.
Estos niños no querrán ser tomados como chiquillos que nada entienden y que nada saben, querrán una relación simétrica, donde todos se respeten desde el lugar en donde están. Querrán jugar, y aprender jugando.
Defenderán a otros niños de apariencia “más débil” que ellos.
Se quedarán con menos, con tal de dar a los demás.
Estos nuevos seres disfrutan plenamente la naturaleza, poseen una conexión y percepción de ella que nadie les enseñó o pudo enseñar.
Sensibles, pero no débiles, porque la energía que traen los ayudará a enfrentarse al mundo.
Amorosos, concretos, y a veces, muy terrenales.
¿Y los cristales? Comencemos por los adultos.
¿Cómo reconocer a un adulto con energía cristal?
Soñadores, sensibles, con el corazón abierto al mundo.
Leales y sinceros.
Saben lo que quieren, pero les cuesta encontrarlo en este mundo.
Hablan del amor, pero pocos los comprenden.
A veces se sienten solos, porque no encuentran la pareja, los amigos o familiares con quien compartir lo que traen.
Muchas veces no son comprendidos, son tomados como personas indefensas y de baja autoestima. Pero sí saben quienes son, y saben defenderse, pero no como lo hace la mayoría. No pueden pelearse, y menos físicamente, no tienen esa energía. Saben internamente, conciente o inconcientemente, que al lastimar a otros se lastiman a ellos mismos.
A la energía cristal le cuesta encontrar espacio en el mundo.
No encajan en los empleos tradicionales, ni en la universidad. Deben buscar nuevas posibilidades, de lo contrario se apagan, se deprimen, les cuesta vivir
Sin embargo es necesario recordarles que no se han equivocado en venir; la humanidad se ha equivocado, se ha cegado y muchos han perdido la brújula para volver a casa.
El mundo necesita de estos seres. El mundo necesita su amor y su mensaje.
Poco a poco los nuevos espacios se abren para la energía cristal. Cada vez son más en la tierra y comienzan a unirse. No deben callar lo que tienen para decir, no deben bajar sus brazos, ni venderse al mundo.
Deben continuar defendiendo el amor, y principalmente CONFIAR EN ELLOS. El universo los trajo y los protegerá, NO ESTAN SOLOS.
Pero hay que escucharlos, porque no gritarán, ni tampoco obligaran a nadie a que los escuchen.
Son humildes de corazón y puros de alma.
Los seres con energía cristal, son un complemento para la energía índigo. Cuando los índigos abren caminos, los cristales ponen las semillas que darán frutos de amor.
Cada uno cumple con su propósito.

Los niños cristal o la energía cristal de los niños
Intensamente sensibles. No soportan presenciar o ver peleas, injusticias o malos tratos.
A menudo parecen tímidos y callados, pero cuando hablan, saben lo que tienen para decir.
En la escuela muchas veces, lamentablemente son maltratados por los niños con otra energía, pero siempre habrá un índigo para defenderlos.
Son niños profundamente espirituales, y encuentran en el arte el alimento espiritual que necesitan para equilibrarse. Es por ello que la mayoría de estos niños tienen un gran potencial artístico a desarrollar, que bien estimulado servirá como canal de expresión de su alma. El arte les da vitalidad, ánimo y energía. La música, la pintura, la danza, son su canal para hablar de ellos.
Les cuesta adaptarse a las escuelas tradicionales, sobre todo si estas no estimulan el potencial artístico que traen.
Son curiosos, amorosos e inteligentes.
Tanto Índigos como Cristales suelen percibir los estados anímicos y pensamientos de las personas. Además absorben fácilmente las energías de su entorno, por lo cual hay que ser cuidadosos y responsables ante ellos
¡Qué maravilloso es saber de estos niños y de estos adultos!
Pero muchas veces esta pureza se ve opacada por la mente humana.

Todos somos importantes, únicos. Todos somos seres espirituales despertando cada día a una nueva conciencia.
El niño de hoy es especial y tiene mucho para darnos, pero no debemos estancarnos en la clasificación porque esto es lo que nos aleja de la verdadera esencia de lo que significa índigo o cristal.
Nos aleja porque interiormente pensamos “mi niño es diferente a los demás”. Por lo tanto algo que debería trabajar para la luz, para aclarar el camino de los seres, confunde, crea separación.

Sé de muchos padres que les cuentan a sus niños que son índigo o cristal.
Quizás lo hacen porque quieren ayudarlo, pero el niño no está preparado para entender desde la mente lo que significa esto.
El niño tan solo Es, y ahí se ve la verdadera magia.
Los niños vienen a enseñarnos a AMAR... facilitemos su camino repetandolos como son..solo niños..y por tanto nos necesitan a su lado. <3

Abrazosss Awka..<3