..................................Cambiando Paradigmas .... Psicóloga. Verónica D. Montes ................

lunes, 12 de marzo de 2012

Entrevista a Elsa Punset

Elsa Punset, pedagoga de las emociones

Ante el mundo hay sólo dos actitudes: o miedo o amor.

Soy hija del ´baby boom´ de los 60. Nací en Londres, me crié en EE. UU., Haití, Madrid... y vivo en Londres. Tengo dos hijas pequeñas. Máster en Humanidades por Oxford, me dedico a la pedagogía de la gestión emocional. Soy adogmática.
Me permito sentir el misterio. 


Entrevista de VÍCTOR-M. AMELA - 25/01/2010

Vivió en Haití?
Siendo niña, sí. Por eso sé que en Europa vivimos de espaldas a los riesgos que allí amenazan las vidas: allí viven intensamente, aquí vivimos anestesiados.
Pues bendita anestesia.
Pero pagamos un precio: aquí la vida no late. Y, aburridos, llegamos a deprimirnos. Y nos afanamos en distraernos.

¿Y qué propone?
Adiestrémonos en gestión emocional. La ciencia demuestra que todo - hasta un pensamiento-arranca de una emoción: ¡somos animales más emocionales que racionales!
Pobre Descartes, qué viejo se queda...
Sí, pero ¡en las escuelas todavía no enseñamos a nuestros niños a gestionar sus emociones! ¡Qué atraso!: hacerlo reportaría fabulosas bendiciones para ellos y la humanidad.

¿Se puede enseñar a sentir?
Nos enseñan a desconfiar, recelar, sospechar, despreciar, odiar... ¡Que nos enseñen a amar! Nos enseñan que el mundo es peligroso, pudiendo enseñarnos que es fabuloso.

¿Lo es?
Hay sólo dos modos de relacionarse con el mundo: desde el miedo o desde el amor. Sentir curiosidad por el mundo es amarlo, es lo mismo. ¡Es lo que sienten los niños pequeños!. Esa inocencia radical, ese amor, curiosidad... es lo que luego nos enseñan a perder.

¿Por qué hacemos eso?
La educación aún premia las emociones defensivas ante el mundo, en lugar de premiar las emociones amorosas hacia el mundo. Será por algo, ¿no?. Porque seguimos anclados en lo que hace 100.000 años resultó útil para sobrevivir en entornos cuajados de peligros: herramientas - miedo, angustia, tristeza, ira...-que hoy quedan anticuadas y son ya un lastre.

¿Recibió usted de sus padres la educación correcta?.
Me dieron las dos cosas que hoy se sabe que son los dos puntales de la felicidad.
¡Dígamelas, por favor!
Una: afecto. 
Dos: sentido de control sobre tu vida.

Explíqueme esto?.
Recibir afecto en la infancia infunde confianza y seguridad ante el mundo. Estudios sobre resiliencia - capacidad para remontar tremendos reveses-demuestran que niños tratados horriblemente que se agarraron a una mirada amorosa... pudieron remontar. 
Puntal uno: amor. 
Puntal dos…Soberanía sobre tu vida. 
Mis padres jamás hablaron de "la suerte", sólo de cómo actuar: eso te enseña a ser el piloto de tu vida.

¿Qué emociones premia usted al educar a sus hijas?
Las ayudo a identificar cada una de sus emociones: así entienden qué está pasándoles.

¿Hay emociones positivas y negativas?
No. Hay emociones útiles e inútiles. Si un día están tristes, las entreno a no temer a la tristeza y a saber qué está mostrándoles.

¿Y qué muestra la tristeza?
El temor por una pérdida: por una ausencia, una carencia, porque algo termina... Si comprendes eso, ¡lo llevas mejor! Si no, esa tristeza puede agobiarte, angustiarte... y hasta llevarte a medicarte sin necesidad. Eso se hace mucho por aquí. Porque no escuchamos lo bastante las voces de nuestras emociones. Habitúate a escucharlas y entenderás tus pasiones. Y una vida con pasión y sentido es más feliz.

¿Cómo puedo descubrir mi sentido?
Al levantarte, cuestiónate: "¿Qué me hace hoy levantarme?". 
El psicólogo Viktor Frankl lo planteó más crudamente: "¿Qué impide que hoy me suicide?". Lo que se esconde tras la respuesta es tu sentido.

¿Y luego?
Aliméntalo. De lo contrario, podrías matarlo de hambre. Hazte regalos emocionales. Quizá sea apuntarte a una clase de baile... ¡Siembra tu vida de pequeños cambios!

¿Eso me hará más feliz?
Conozco un estudio hecho sobre 5.000 personas: un 10% declararon ser felices. Pues bien, se observó que esas 500 personas habían seguido un patrón común...
¿Cuál? Cuente.
Se habían marcado una meta. La habían puesto por escrito (o se la habían contado a conocidos), en una especie de compromiso público. Habían establecido metas volantes, etapas menores en el camino hacia su gran objetivo. Y cada vez que alcanzaban una meta volante, se gratificaban con algo.
Tomo nota.
Un amigo mío indio me dijo: "A vosotros os entierran a los 80 años, pero os morís a los 20". Me hizo pensar... 
Hoy sabemos que nuestro cerebro es muy plástico: ¡podemos reinventarnos cada día durante 80 años! No lo hacemos. ¡Atrevámonos, pues es posible!

Excitante: reinventarte cada día.
Abrámonos a la realidad..., que incluye el misterio. Darle la espalda a lo inconsciente y a lo misterioso nos priva del 80% de la realidad, ¡la convierte en plana y aburrida!

¿Cómo aconseja mirar la realidad?
La ciencia nos habla de lo que sabe, pero no puede hablarnos de lo que no sabe. No prescindas de todo eso. ¡Permítete inventar preguntas y soñar respuestas! Es esa capacidad de inventar y soñar (y no sólo la de analizar) la que nos hace plenamente humanos.
Gracias, maestra.
¡Los maestros son los niños! Ellos nacen libres, con esa inocencia radical abierta al misterio, a la confianza en la vida y al amor al mundo. Si la conservásemos..., ¡seríamos siempre creativos y felices!

Inocencia radical?
"Aspiro a ser la más lograda versión de mí mismo" (Merleau-Ponty), 
"Sueña sin que los sueños te esclavicen" (Rudyard Kipling), 
"El ángel de mi nacimiento dijo: ´Pequeña criatura hecha de alegría y júbilo, 
¡corre y ama sin ayuda de nadie en la Tierra!´" (William Blake)
son máximas citadas por Elsa Punset en su ensayo Inocencia radical (Aguilar), que apela a los últimos hallazgos de las neurociencias y la psicología para ponerlos al servicio de "una vida con pasión y sentido", dice ella. Hija de Eduard Punset, profundiza en la gestión de las emociones y aboga por enseñarla en las escuelas.

Me despide con una frase de Jung: "La vida te hace una pregunta cuya única respuesta es tu vida".

La Educación Transpersonal

Los diversos conflictos que suceden en el ámbito educativo, pueden ser abordados desde la renovada visión del que ha invertido en conocerse a sí mismo. En realidad, estos conflictos acaban siendo reflejos de nuestros propios conflictos internos. Desde este enfoque, cada situación crítica, por contradictoria que parezca, revela un potencial creativo de apertura y aprendizaje, y se convierte en una oportunidad para el crecimiento integral del educador y el educando.
Desde este enfoque se integran y trascienden los paradigmas educativos precedentes, centrados en la instrucción y en el desarrollo de la dimensión intelectual, y procedemos a atender también a las dimensiones físicas, prácticas, emocionales, creativas y espirituales del ser humano.
La práctica continuada de la meditación y de la atención plena, permiten al educador observar su mundo interior, y transformar su vida en un proceso de aprendizaje y reeducación continuo
 
 

1. Autoconocimiento

La llamada sabiduría parte de la indagación de todos aquellos contenidos internos que, al poder ser observados, permiten no solo perspectivas constructivas, sino que también pueden ser relativizados al comprobar que no conforman nuestra identidad esencial. Esto da lugar al nacimiento de una educación dirigida al Ser, un enfoque desde el que descubrir el amor consciente, un amor que permite vernos y discernir con claridad. En realidad, educamos por lo que Somos.
La Educación Transpersonal abraza todo aquello que contribuye a una personalidad bien formada, con la intención de educar a una mente más feliz. Por otro lado permite el valor de reconocer y aceptar con autenticidad aquellos aspectos más sombríos de nuestra personalidad. Se recupera para ello el valor de los cuentos y metáforas ancestrales, que se narran oralmente para construir la personalidad que creativamente elegimos modelar y expresar.


2. Amor: educación emocional y relaciones interpersonales conscientes

Educación emocional y relaciones interpersonales conscientes
El abrazo sanador del amor que permite reconocernos en todas nuestras dimensiones, posibilita que nuestras relaciones con los demás sean más armónicas y serenas. 
El otro se convierte entonces en un canal para nuestro propio proceso de aprendizaje, es por ello que educamos para saber reconocer su reflejo. 
La alquimia de una educación emocional transpersonal nos permite escuchar mejor nuestros mensajes emocionales, y nos lleva a comunicarnos de una manera más coherente y fraternal. 
En este sentido sabemos que el que tiene un problema con el otro, lo que en realidad tiene es un problema consigo mismo.

3. Sentido vital y vocación: Valores, inteligencias múltiples y creatividad

La liberación de cuentas pendientes con el pasado, y de las dependencias en las que buscamos la felicidad sin éxito, nos permite despertar a una vida más lúcida. 
El afrontamiento del miedo a la muerte, nos permite abrirnos plenamente a la vida. Es entonces cuando ésta se ordena inteligentemente, y posibilita la realización de nuestro propósito vital. 
Sucede que a partir de esta toma de conciencia, nos movemos desde unos valores nacidos desde nuestra conexión con el Ser, una esencia que termina por expresarse en un comportamiento virtuoso.
La educación Transpersonal se alinea con aquello que impulsa inteligentemente nuestro crecimiento evolutivo, armonizando la vida con el entorno y manteniendo una relación íntima y esencial con el mismo. 
La inspiración alineada convierte el proceso creativo en el arte transpersonal de vivir. 
Del sentimiento de comunión con el entorno nace una nueva Conciencia Ecológica, que hace observar al mundo como la casa de nuestro Ser. 
El educando se acerca entonces al conocimiento contenido sobre el mundo en las diferentes áreas del saber, con el entusiasmo de lo que habla de uno mismo.


4. Educación Familiar

Educación Familiar
Esta educación toma muy en cuenta la labor educativa de los padres, que resulta fundamental a la hora de cambiar nuestra visión sobre la educación.
Abordamos  el verdadero significado de una educación que parte del amor incondicionado hacia los hijos, para dirigir hacia ellos una atención efectiva hacia sus potenciales de desarrollo, y generar una comunicación coherente con ellos, y un orden armónico que posibilite la libertad para que cada miembro encuentre su lugar en el mundo.

¿Qué relación existe entre la Educación Transpersonal, la psicoterapia y la espiritualidad?

El acompañamiento emocional y una vivencia espiritual libre de creencias religiosas, han permanecido fuera de la formación educativa. La integración de estos pilares posibilita un mejor acompañamiento de los aspectos emocionales del ser humano, y apuntan a la cuestión fundamental de la paz interior.
La espiritualidad que subyace tras lo transpersonal está desligado del fenómeno religioso, y apunta sencillamente a las cuestiones más esenciales del ser humano. Una educación para Ser, y el amor comprensivo que acompaña a la vivencia del nivel esencial, señala un proceso educativo en el que se cultiva esta vivencia, más que inculcar creencias, doctrinas y otros ámbitos de la moral que pueden llegar a producir cierto respeto, pero no una asimilación plena de sus valores fundamentales.
La Educación Transpersonal aborda lo espiritual desde los siguientes ámbitos:
  • La búsqueda del sentido de la vida.
  • El reconocimiento de nuestra esencia.
  • La capacidad de amar como un estado de conciencia no condicionado.
  • La facultad de distanciarse del ego y la posibilidad de observarlo.
  • El sentimiento de trascendencia.
  • El ejercicio de la creatividad inspirada.
  • El ámbito de la intuición.
  • La experiencia interior de certeza.
  • La educación como vocación y servicio a la humanidad.
 La Educación Transpersonal no remite a una nueva metodología, ni consiste únicamente en una colección de innovadoras técnicas, sino que más bien apunta al fundamento esencial de todas ellas. 
No necesita del cambio de los sistemas educativos presentes, sino que se responsabiliza de aportar una revisión de nuestra propia práctica educativa, y de nuestro propio proceso de reeducación.


¿Hacia adonde apunta una educación para el crecimiento integral?

Además de aumentar notablemente el rendimiento académico con la práctica de la atención sostenida, la Educación Transpersonal conlleva el incremento de motivación que surge de un aprendizaje más significativo y conectado con el sentido de la vida.
El comportamiento entonces se vuelve de forma natural más virtuoso y acorde con el impulso evolutivo que lleva a sacar lo mejor de cada uno. Las crisis se resuelven de modo más armónico, y las emociones generadas dejan de atemorizarnos para señalar la dirección del cambio.

El sesgo intelectualista de la educación actual nos lleva a encorsetar nuestra creatividad en rígidas metodologías que persiguen cumplir ciertos objetivos educativos. Este enfoque racionalista lleva a la uniformización de los educandos, a los que se busca incorporar al sistema productivo de manera automatizada. De esta forma, acabamos abordando la educación desde la manipulación que conlleva tratar de dirigirles hacia nuestros resultados esperados.
Cuando nuestra intención eleva nuestra mirada hacia lo esencial, y sentimos la claridad y el amor que brotan de este estado de conciencia, sucede que liberamos a los educandos de nuestras condiciones y expectativas. Entendemos la excelencia como el desarrollo del potencial del educando, la felicidad de llegar a expresar plenamente aquello en lo que uno encuentra el supremo gozo de servir a los demás. Es entonces cuando acompañamos los procesos educativos que suceden de forma sincrónica y significativa, enriqueciendo la educación y sentando firmemente sus bases.
La Educación Transpersonal acompaña la transformación de la sociedad, alineada con una silenciosa revolución de Conciencia que actualmente se abre paso de uno en uno, a través de este histórico momento de crisis. Una crisis que evidencia lo que ya no resulta válido, y dirige nuestra mirada a lo esencial.